“Hola, me llamo Ryanna, tengo 18 años, soy sorda y trabajo en la empresa Visualfy como gestora de contenidos y atención al cliente. Hace unas décadas mi situación laboral hubiera sido literalmente imposible, pero, afortunadamente, hoy los jóvenes sordos nos estamos haciendo escuchar y la inclusión en el mundo laboral empieza a ser una realidad”.
Las cifras de desempleo y trabajo para personas sordas han mejorado con respecto a décadas anteriores, aunque todavía queda mucho por hacer.
Según el ‘I Informe del Observatorio sobre Discapacidad y Mercado de Trabajo en España’ de la ONCE de 2016, las personas con discapacidad sensorial auditiva presentan una tasa de desempleo del 55,4%.Por otro lado, según la Confederación Estatal de Personas Sordas la tasa de empleo de personas sordas es del 78% .
Al margen de las fuentes, un gran número de personas con discapacidad auditiva no tienen trabajo, lo que está claro es que un gran número de personas con discapacidad auditiva no tienen trabajo, o en su defecto, tienen acceso a un empleo de muy baja calidad y mal remunerado. Sin embargo, las cifras han mejorado con respecto a décadas anteriores y la evolución es alentadora.
Las barreras a las que nos enfrentamos las personas sordas existen tanto en la fase de búsqueda de empleo como en el mismo lugar de trabajo. De hecho, 1 de cada 4 personas sordas en Reino Unido abandona su trabajo por discriminación de sus colegas o empleadores. ¿No os parece un dato alarmante?.
El desconocimiento por parte de los oyentes, la consideración ilógica y errónea de que la sordera conlleva otro tipo de discapacidades o la asunción de que una persona sorda es menos inteligente que una oyente, ha dado lugar a muchos prejuicios en el ámbito laboral. Tanto, que la mayor parte de las veces ni siquiera tenemos la oportunidad de conseguir una entrevista de trabajo para mostrar lo que valemos.
A esto se une el hecho de que los empresarios tampoco saben cómo integrar a las personas con pérdida auditiva dentro de su organización. El empleador teme que sea costoso y/o complicado y, sin embargo, este temor no representa la realidad. Los beneficios de emplear a una persona con discapacidad auditiva son muchos. A título de ejemplo:
- Las personas sordas estamos acostumbradas a lidiar con situaciones difíciles en la comunicación cotidiana. Por esta razón, desarrollamos habilidades cognitivas para la resolución de problemas.
- Nuestras experiencias han sido muy diferentes a las de los oyentes, por lo que aportamos puntos de vista e ideas al equipo que difícilmente podrían imaginar, por ejemplo, en los departamentos de marketing.
- El acceso al mercado laboral no es fácil para nosotros. Es por ello, que somos personas muy perseverantes para conservar y evolucionar en nuestro puesto de trabajo. Valoramos la oportunidad.
- Trabajar con la diversidad enriquece la cultura de la organización. El equipo se vuelve más abierto y dispuesto a esforzarse por el bien común del equipo.
Como se puede apreciar, las personas sordas podemos trabajar en todo aquello que nos propongamos, sin límites. Nuestras capacidades son iguales a las de los oyentes, con la única salvedad de tener que esforzarnos más para conseguir nuestras metas. Y es justo ahí cuando nuestra presunta debilidad se convierte en una fortaleza, la RESILIENCIA: nuestra capacidad innata de adaptarnos positivamente a situaciones adversas.
Nuestras capacidades son iguales que las de los oyentes, con la única salvedad de tener que esforzarnos más para obtener nuestras metas Y ahí es cuando nuestra presunta debilidad se convierte en fortaleza, la RESILIENCIA: nuestra… Clic para tuitearHoy nos gustaría presentaros a varias personas sordas cuyas cualificaciones y actitud les han llevado al éxito laboral. Como emprendedores, o como trabajadores por cuenta ajena, son verdaderos ejemplos a seguir, llenos de fuerza, motivación y esperanza.
Testimonios inspiradores de trabajadores sordos que no te dejarán indiferente.
El primero de ellos es el de Mauro Xesteira, de 40 años de edad, con pérdida auditiva severa, emprendedor y residente en Valencia. Mauro ha trabajado en diferentes sectores y actualmente dirige su propio proyecto, Capazia , empresa especializada en la dirección y apoyo de proyectos emprendedores liderados por personas con discapacidad funcional.
Mauro Xesteira, creador de Capazia
Mauro nos cuenta cómo supera las barreras que el entorno le plantea por su pérdida auditiva, y cómo sus audífonos le ayudan a comunicarse. “Estas barreras de comunicación las supero utilizando “trucos” de comunicación que he ido aprendiendo a lo largo de los años. Cuando las personas vocalizan poco o hablan muy deprisa, les entiendo peor. En estos casos, mi truco consiste en hablarles más despacio y centrarme en vocalizar y, al poco tiempo, la persona que tengo delante termina imitándome. La ubicación es otro de mis trucos. En las reuniones en las que hay muchas personas alrededor de una mesa, me sitúo en una de las esquinas para escuchar mejor y poder mirar de frente a todos los participantes”.
Alfonso Balderas Torres, Front End Intermediate de la empresa OCC Mundial
El siguiente testimonio viene de la mano de Alfonso Balderas Torres, Analista de Front End de OCCMundial –México. Alfonso tiene 32 años, es Ingeniero en Tecnologías de la Información y la Comunicación, y es sordo profundo. Para Alfonso ser sordo no ha sido un obstáculo profesional, ya que ha ido superando cada barrera que se ha puesto en el camino.
“Soy el único Sordo trabajando en OCC Mundial y trabajo igual que mis compañeros oyentes. Soy una persona muy creativa e innovadora. En OCC Mundial todos reconocen mi trabajo y mis habilidades, de hecho, varios se acercan a mí para pedirme consejos sobre cómo ser más productivos e innovadores”.
“Yo creo que los sordos podemos desarrollarnos en cualquier ámbito, pero algunos trabajos requieren más esfuerzo y tienen más barreras que otros”.
“A cualquier persona sorda que esté trabajando le recomendaría que vaya más allá de lo que le pide el jefe, que investiguen por su cuenta, que profundicen en el tema y que generen nuevas ideas respecto al mismo, en definitiva, que aporte valor a la empresa”.
“Que sean responsables y cumplidos en su trabajo, ya que, si un sordo no cumple, llega tarde, tiene actitud condescendiente o es flojo, no sólo se cierra las puertas en la empresa, sino que le cierra las puertas a todos los sordos que vienen detrás de él”.
Ignacio Jiménez Puertas, Directivo de operaciones de Sermes CRO y CEO de la plataforma Nacer Sordo
Por último, Ignacio Jiménez Puertas es Directivo de operaciones de Sermes CRO y CEO de la plataforma Nacer Sordo , que os invitamos personalmente a conocer. Ignacio tiene 33 años y padece una sordera bilateral severa, de hecho, está rozando la sordera profunda. Sin embargo, esto no ha sido un obstáculo para su desarrollo profesional, todo lo contrario. Ignacio es de los que demuestra que la sordera no tiene por qué ser una barrera.
“Hay situaciones más difíciles de gestionar, especialmente las referentes a una llamada de teléfono o posibles reuniones con varias personas. Ahora bien, con el empuje del resto de personas implicadas, la sordera es salvada, sin duda, de manera más que satisfactoria. Creo firmemente que, si el sordo quiere, el sordo puede, tan sencillo como eso”
“También utilizo algunos trucos para salvar la sordera a nivel profesional. En la mayoría de los casos, suelo sentarme cerca del ponente o persona que va a llevar la reunión, esto me ayuda muchísimo a seguir la voz cantante y evita “perderme” cosas.”
Ignacio Jiménez, de @nacer_sordo : Con el empuje del resto de personas implicadas, la sordera es salvada, sin duda, de manera más que satisfactoria. Creo firmemente que, si el sordo quiere, el sordo puede, tan sencillo como eso #trabajo… Clic para tuitearLa formación es un claro impulso de accesibilidad para la inclusión laboral de personas sordas
Todos estos testimonios nos sirven de inspiración para seguir derribando barreras y luchar por lo que realmente queremos. Está claro que la tecnología está transformando continuamente la comunicación entre personas sordas y oyentes en el ámbito laboral: correo electrónico, mensajería instantánea y videoconferencia nos facilitan estas tareas comunicativas. Sin embargo, todavía falta un fuerte trabajo de concienciación social por parte de empresas, instituciones y trabajadores.
Desde Visualfy creemos que la formación es uno de los caminos hacia el cambio, dado que la baja inclusión que sufren las personas sordas en los centros educativos hace que sea complicado encontrar personas con discapacidad auditiva con una formación y recorrido. Por eso aportamos nuestro 0,7% de beneficios a la formación de jóvenes sordos, para seguir derribando barreras y facilitar un mejor acceso al mercado laboral. Si eres empresario, tu grano de arena cuenta y mucho.
Pensamos que la diversidad y la inclusión significan avance, y que las empresas que no den el paso y pongan en práctica políticas de contratación inclusiva, se estarán perdiendo talento muy valioso y también estarán perdiendo valor como organización.
¿Y tú? ¿Quieres seguir conociendo más historias inspiradoras como la de Mauro, Alfonso o Ignacio?