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7 actividades y juegos ideales para niños sordos


La infancia es una etapa imprescindible en la vida de cualquier ser humano. Jugar es un derecho fundamental del que todos los niños deben gozar, incluidos los niños sordos. La incapacidad de oír no debería ser un impedimento para permitirles disfrutar de las ventajas de ser niños. Hay muchas formas con las que los niños sordos pueden divertirse en su tiempo libre. Hoy os traemos 7 actividades y juegos ideales para niños sordos.

Tal y como explicamos en nuestro  ‘Sobreproteger a un niño sordo… Mejor no’, la manera en la que enfoquemos la educación que demos a nuestros hijos e hijas será clave para su desarrollo posterior. Y cómo no, los juegos con los que nuestros hijos se entretienen desde edades tempranas son parte de esos cimientos que constituirán la base de su educación como personas.

Una característica incuestionable que poseen las personas que padecen algún tipo de discapacidad física es su habilidad para sobreponerse a sus limitaciones desarrollando más otras capacidades. En base a esta idea resulta interesante empezar a estimularlas desde edades tempranas.

los juegos con los que nuestros hijos se entretienen desde edades tempranas son parte de esos cimientos que constituirán la base de su educación como personas. Clic para tuitear

En el caso de los niños sordos, los juegos y actividades destinadas a potenciar sentidos como el tacto, la vista o el olfato favorecen su desarrollo cognitivo al mismo tiempo que les permiten conectar con el mundo que les rodea.

A continuación, te proponemos una lista de 7 actividades y juegos ideales para niños sordos:

Puzzles y rompecabezas

Entretenerse haciendo puzzles y rompecabezas incrementa la capacidad de observación de los niños, su agilidad visual ayuda al desarrollo de la visión espacial que es uno de los elementos clave de la comunicación en Lengua de Signos. Además, los niños aprenden a organizarse y extraer información de los elementos que les rodean.

Actividades al aire libre

Optar por las actividades al aire libre favorece la estimulación multisensorial. Permite a los niños conocer el entorno que les rodea, experimentar con los objetos a su alrededor. Si, por ejemplo, la actividad se realiza en un jardín el niño o niña puede explorar los diferentes elementos, aprender a distinguir olores de plantas y flores, tocar diferentes texturas…

Las actividades al aire libre, también permite a los niños dejar de lado su discapacidad y les animan a relacionarse con otros niños, a jugar con ellos, mejorando así sus habilidades sociales.

Canciones en LSE

Aprender a signar canciones ayuda a los niños a aprender de forma lúdica y entretenida la Lengua de Signos. Además, les ayuda con la coordinación de las manos, incrementa su capacidad de percepción del espacio visual, mejora sus habilidades expresivas y les permite aumentar la autoestima y la confianza en sí mismos.

Alfabeto dactilológico

Existen juegos de fichas mediante el cual los niños pequeños pueden aprender el alfabeto dactilológico emparejando cada letra con su signo. Al mismo tiempo que ellos juegan es recomendable animarles a hacer los signos con sus propias manos para así iniciarles poco a poco en la utilización de la Lengua de Signos. De esta forma aprenden el alfabeto dactilológico al mismo tiempo que mejoran la coordinación de sus manos.

Manualidades

La práctica de manualidades en niños y niñas, además de impulsar su creatividad, les ayuda a centrar su atención, a desarrollar su motricidad fina (coordinación de movimientos musculares de pequeñas partes del cuerpo como de los dedos o los ojos) y a olvidarse de sus limitaciones dejando volar su imaginación.

También favorece el desarrollo de los sentidos de la vista y el tacto. Por un lado, los colores, los dibujos y las formas permiten al sentido visual desenvolverse libremente. Por otro, tocar diferentes materiales con diferentes texturas: plastilina, ceras, pintura de dedos, barro… les posibilita experimentar y descubrir divirtiéndose los diferentes elementos que conforman su entorno.

Taller de cocina

Al igual que las actividades al aire libre o las manualidades, cocinar beneficia a los niños en diferentes aspectos. Por un lado, aprenden a conocer los diferentes alimentos, sus nutrientes, su origen… También es una forma de conocer diferentes sabores, aprendiendo a combinarlos entre ellos, también los olores, el tacto…

Es una buena excusa para pasar tiempo en familia o para mejorar las habilidades sociales asistiendo a un taller junto a otros niños.

Cuentos en LSE

Como cualquier otro niño, los niños sordos también disfrutan de las historias fantásticas de los cuentos infantiles. Contar cuentos en LSE es una buena forma de inculcarles la Lengua de Signos, haciendo que retengan los diferentes signos y los aprendan.

Además, los cuentos son un fuerte potenciador de la imaginación de los niños. A través de lo que se cuenta los niños deben imaginarse los personajes y las emociones que les invaden, los lujares, los objetos, las situaciones… A raíz de los cuentos los niños desarrollan su capacidad inventiva, crean otras historias, otros mundos, personajes fantásticos… con su inagotable imaginación.

Como cualquier otro niño, los niños sordos también disfrutan de las historias fantásticas de los cuentos infantiles. Contar cuentos en LSE es una buena forma de inculcarles la Lengua de Signos, haciendo que retengan los diferentes signos… Clic para tuitear

Es normal siendo padres, tener ciertos miedos al principio, pero no por ello tenemos que evitar que nuestros hijos jueguen, sacien su curiosidad o exploren su entorno como lo haría cualquier otro niño. Como puedes ver, hay infinidad de actividades y juegos con las que los niños sordos pueden divertirse al mismo tiempo que aprenden, desarrollan sus sentidos y experimentan con su entorno.